Faltan 50 días para el arranque de los XVI Juegos Panamericanos Guadalajara 2011. Y Lagos de Moreno es subsede de los encuentros de beisbol, en parte por la gran afición de sus habitantes al rey de los deportes, y en parte, por la voluntad del gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, oriundo de esta tierra, que decidió construir aquí el estadio.
Justo en este momento se lleva a cabo el mundial de beisbol, también por la voluntad de otro laguense, Alonso Pérez González, presidente de la Federación Mexicana de Beisbol, el estadio Panamericano (que unos afirman con seguridad envidiable, que se llama “Armando Reynoso”) y por motivos que desconozco los partidos no han registrado buenas entradas, aunque el entusiasmo competitivo es alto. Seguramente ahora que se acercan los partidos definitorios, rumbo a la final del domingo, cambiará el panorama.
La ciudad tiene buenas expectativas sobre la temporada panamericana. Muchos comerciantes, prestadores de servicios y sectores gubernamentales se están preparando para recibir adecuadamente al turismo esperado. Tengo el dato que los hoteles ya están reservados al cien por ciento y habrá que utilizar hospedaje de las ciudades vecinas.
Un fenómeno que se repetirá, como en el Nacional Charro, es la renta de casas y departamentos amueblados. Los propietarios, simplemente se salen esos días de casa, se van a dormir con la suegra, y dejan las fincas a los huéspedes.
La dirección de Turismo, que encabeza Susana Muñoz Torres, sigue adelante con los cursos de capacitación y con la promoción. Y es justo, pues este año, cuando menos, Lagos de Moreno no volverá a tener un escaparate promocional tan destacado y de tal envergadura.
Qué tanta derrama económica quedará en nuestra ciudad, no es un tema que domine, pero seguramente será muy importante. En este tipo de jornadas, donde hay para unos hay para otros… los hoteles requieren más empleados, aunque sea temporalmente; los restaurantes, cafeterías y bares, igualmente; todos éstos, demandarán más insumos y productos… y la lista es larga.
Las tiendas de recuerdos y regalos se verán beneficiadas, como los vendedores de cualquier producto atractivo para los turistas… hasta los músicos ambulantes, que andan de esquina en esquina, aumentan su recaudación.
La clave del éxito, cuando los turistas lleguen –en cualquier día del año- es la atención y la calidad en la prestación de los servicios. Nuestra ciudad cuenta con los atractivos suficientes y sobrados para que se interesen en conocerla, en recorrerla y en volver en el futuro, pero si un visitante no encuentra el nivel de servicios que demanda, simplemente no repetirá la experiencia.
Podrá haber mucha publicidad –que no es el caso, insisto- pero en turismo, la mejor de todas es la que corre de boca en boca. Lo que cuente sobre su experiencia, cuando regrese a su casa, es lo que venderá a Lagos de Moreno.
El éxito, está en nosotros mismos, todos. Los habitantes de Lagos que –aparentemente- no están directamente involucrados en el turismo, también tienen su parte en la atención. Ellos son los huéspedes, nosotros los anfitriones. Nomás.
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